viernes, 3 de abril de 2020

Momentos


         Momentos, que palabra tan bonita y tan completa para narrar una historia que nace desde el mismo corazón, del mismo amor que se le procesa a aquellas personas que convirtieron aquellos momentos en parte de mi vida, en parte de mi realidad, en parte de mi…Existencia.

         Por cuál de ellos comenzar y ser fiel a lo que mi humilde corazón dicta, por donde decidir cuál fue el primero y cuál fue el más importante, pues todos ellos fueron únicos, fueron especiales, fueron, imborrables.

         A lo mejor siguiendo desde mi tiempo o desde mi recuerdo lo que cada paso significo, todo el mundo pueda comprender la importancia de lo aquí contado…

         Todo nace desde una propuesta, que con toda la intención se realiza, la propuesta de ser acompañado en una nueva a ventura, en nuevo reto, en nuevo Camino de Santiago, pero una propuesta no atípica y no planeada, sino una propuesta realizada con cariño, con sinceridad, con esperanza de ser llevada a cabo y sobre preparada desde la serenidad meditada, desde el cariño y el respeto a lo que se va a realizar pero con el miedo de saber si por fin se podrán hacer realidad esas promesas tan repetidas, tan recitadas y sobre todo tan esperadas.

         Momento donde todo comienza, donde todo germina y donde todo nace, una ilusión una forma de creer y de soñar, una forma de compartir y una forma de entregar a los demás una gran parte de ti, es el momento donde un preparativo se convierte en símbolo de fraternidad sinceridad, donde cualquier excusa es buena para tachar un nuevo día en el calendario, hacia una cuenta atrás imparable, pero eterna, una cuenta atrás donde los sentimientos se tensan como las cuerdas de un arpa y sobre todo donde todo es posible…todo se puede hacer realidad.

         Es la ropa escogida con mimo y cuidado, son los gastos los mas ahorrados y los más apreciados, pero son las familias, los amigos y aquellos que nos hacen sentir vivos, los que nos miran con ojos de alegría, de ilusión, de añoranza y sobre todo de apoyo incondicional, un apoyo que en otros momentos serán más que necesarios, eran más que importantes y sobre todo serán… los que ayuden a conseguir cumplir con nuestra promesa…

         Es la última en entrar y la ultima en salir, pues sin ella a lo mejor aquel lugar quedaría vacio de peregrinos, esa piedra que es buscada que es entregada, para depositar en aquella plaza que siempre es amable con el que llega, esa plaza que dice bienvenido y enhorabuena, esa plaza que ver caer lagrimas por aquellos que tanto la anhelaron, y para cumplir con ella le entregan esa piedra que trajeron de sus casa, para ser comida por el tiempo, por los hombres…

         Ya solo queda salir, dar los besos en ese momento que aun sabiendo que no es una despedida definitiva sino temporal, se convierten en besos difíciles, amargos y sobre todo besos de distancia y sufrimiento. Se dejan medias sonrisas colgadas en el espacio mientras nuestras manos agitan al aire el gesto de todo va a salir bien, de todo va a seguir su camino cuando volvamos, cuando volvamos a vosotros…son besos de ánimo pues el camino no perdona y tampoco olvida…

         Son las risas nerviosas, las primeras fotos y los primeros vistazos rápidos de aquellos papeles, que todavía no tienen significado completos, sellos, Compostelas, y palabras de cariño de aquellos que todavía son extraños, el mejor recibimiento de aquellos que se enfrentan a lo desconocido…

         Pero es ese momento de decir buenas noches el que nos trae de nuevo a la realidad, el sueño a comenzado, las personas creen en lo que otros contaron, pero ahora son las piernas, son los brazos y espaldas, junto al corazón los que harán posible…lo que en sueños ya vivimos…

         “Que en el camino del día, como en el camino de la vida, el corazón, os guie…Buen camino, Hermano”, palabras recitadas, entre sombras de un amanecer que todavía no ha llegado, y el sonar metálico de aquellas que serian nuestros apoyos en ese caminar dejaban sus primeras huellas en el suelo…

         Que seguir y a donde dirigir nuestras miradas, siempre hacia a delante decían unos mientras otros miraban lo que se dejaba a tras, no sin nostalgia, pero si con la preocupación, de aquella de duda de ser capaz o no de llegar a medir nuestras vidas a tiempos pasados… Pero es la voz de alguien la que recuerda, que esa flecha amarilla que en el entorno se camufla, que a los extraños, poco les cuenta, indica el camino hasta la meta, el camino hasta…

         Y detrás de ese paso llegara otro paso, y después de ese llegara otro igual de importante que el anterior, pues todos los pasos van acompañados de una confidencia, de un desahogo, de una preocupación, que entregada al hermano que al lado tuyo camina, se convierte en un secreto, en una confesión, en una lealtad que por siempre permanecerá guardada y protegida…

         Pero es la palabra Buen Camino, la que te lleva a escuchar a otro que a tu lado dejan sus huellas de zapato, en un arena frágil, que con ayuda del viento borrara, en breves segundos, pero que harán que algo entre los mismos surjan para no ser olvidados.

         Personas de diferentes nacionalidades, que no tienen significado en el Camino, lenguas que sin ser entendidas, son compartidas y sonreídas para saber que allí donde más lo necesite tendrá un amigo, si un amigo…pero serán personas de nuestra propia lengua, con diferentes acentos de allí y de acá los que hagan que nuestra alma sea inundada de felicidad, de alegría de esperanza…de verdadero sentimiento de lealtad, de fe y sobre todo de amor…amor fraterno amor que no se quiebra con la distancia, amor que no se pierde por la distancia amor, de aquellos que regalan sin esperar nada a cambio…

         Es de nuevo el destino con aquel sello, después de una sonrisa de un apretón de manos, de los mejores deseos y después de saber que los unos estarían para los otros, donde surge aquello que dicen en el Camino…es eterno.

         No hubo ni día mañana que todos compartiéramos con todos nuestras penas y nuestras alegrías, no hubo día donde mis heridas, las no visibles fueran curadas por aquellos que son mis hermanos, al igual que aquellos que no conocía tanto, hacían que la palabra ayuda tuviera un significado completo, pues en sus gestos y en sus palabras solo había cariño y verdadero amor…

         Pronto los unos y los otros y aquellos que se fueron uniendo poco a poco a ese grupo sin par, se iba haciendo inseparables, se iban haciendo una pequeña familia una familia, donde nadie era más que nadie, donde la palabra era capaz de ayudar y no de herir, donde las manos ayudaban a levantarse al débil, incluso hacerle ver, que nunca hay que rendirse, que nunca se puede abandonar, que nunca…nunca se está solo…

         Y ese día y esa noche, y ese nuevo amanecer y ese nuevo anochecer, hacia que nuestros corazones, ya no fueran extraños, sino parte del otro, donde todo era posible, incluso cambiar el mundo, y decirle al mismo....hoy pase lo que pase no me quitas la sonrisa…

         Pero es verdad que no fueron todos momentos dulces pues las piernas fallan, el corazón se cansa y la distancia hace mella, y si a todo esto le añades agua de lluvia, le añades cansancio y le añades….aquello que cada uno guardamos y que a veces nos hace ser…egoístas, cabezotas, orgullosos… el día se hace duro, complicado, se hace cuesta arriba y sobre todo se hace amargo, pero con volver la mirada y ver a tu hermano halar, cantar o porque no decirlo bromear…aunque esta no tenga final, te das cuenta de que la vida esta para vivirla y disfrutarla en cada segundo y en cada instante…

         Pero es aquella pequeña ermita, a la que llaman de san marcos, con las agujas de la majestuosa Catedral de fondo, la que indica que las viandas y ls metros estaña  punto de acabarse, donde las emociones ahogan el corazón, donde las lagrimas brotan de alegría y no de tristeza, y donde esas manos entrelazadas al pasar por su umbral nos recuerdan, que no hace falta compartir la misma sangre…para sentirte… amado.

         Allí donde las palabras se convierten en oración, donde los gestos son para aquellos que en anteriores ocasiones pudieron hacerlo, pero en esta el destino les dio las espalda, por aquellos que caminaron a tu lado, por todos ellos…dices allí donde las palaras revotan en paredes y muros…dices GRACIAS…

         Y allí la piedra de la promesa de regresar es entregada junto a la de otros tantos que antes que uno mismo las entregaron, donde nadie te juzga, donde nadie te mira, donde uno es… y deja ser…

         Pero al Camino le quedan los últimos momentos, el reencuentro en aquella plaza, que siempre está llena de vida, siempre está llena de amigos, el momento de tocar con la yemas de los dedos el cielo, y dejar que por fin ese abrazo sea de enhorabuena, que ese besos sea de a ti debo llegar a aquí… y sobre todo esa imagen de aquellos que compartieron contigo camino, al verte y decir…Gracias hermano por estar, donde yo estoy.

         Y entre lagrimas, y sollozos cortados por líneas de teléfono que nos acercan a los más lejanos entendemos que el fin esta cerca, el final de un sueño esta ya próximo…

         Pero antes de volver y donde todo parecía terminado y que nada podía hacerlo diferente, una cena de entre iguales, hizo que de nuevo la humanidad, el amor y sobre todo el respeto unieran a aquellos que ya eran hermanos… y allí mientras unos dejaban palabras y abrazos, otros dejaban alegría y sinceridad… hubo alguien que nos recordó lo que habíamos conseguido…

         “Me habían dicho muchas cosas del camino, me habían contado tantas cosas que parecía todo increíble, pero sin duda alguna el Camino es…PA VIVIRLO”.

         Gracias hermanos, por haberme acompañado en esta aventura de la vida, gracias por dejarme aprender de todo lo bueno que tenéis, gracias por dejarme creer que todo se arregla hablando y sobre todo gracias por vuestra paciencia conmigo…

         Gracias a mis hermanos de Cádiz, Castellón Ávila, Italia, Málaga, pues sin ellos no habría encontrado las fuerzas para seguir pensado que esas tierras aunque lejanas, ya forman parte de mi vida, forman parte de mi ser…y sobre todo forman parte de aquello que un día fue un sueño…

         Gracias por compartir vuestros momentos con este humilde peregrino, con este humilde hermano, que os echa de menos, que no os olvida y que sobre todo os desea con su pequeño corazón….

         QUE EN EL CAMINO DEL DIA, COMO EN EL CAMINO DE LA VIDA, EL CORAZON OS GUIE… BUEN CAMINO, HERMANO.

  

Pirata
c/San Diego,1. 47003
983393207
ideoturcyl@ideotur.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario